El Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, fueron unos excelentes inventos que trataban ponder orden en el desorden en el concierto económico internacional. Pero los puntos de partidos de entonces han cambiado a los de hoy de manera vertiginosa. Consiguientemente el objetivo prioritario de las conferencias de Bretton Woods fue la constitución de estos dos organismos internacionales, buscando la anhelada estabilidad. Esto suponía que los países que sufrieran desequilibrios en su balanzas de pagos tendrían disponiblidad de recursos monetarios, para evitar desequilibrios en los sitemas cambiarios. Pero miremos el presente. Si bien es verdad que si nos trasladamos al 41, estas preceptos podían presentar cierta utilidad, que en definitiva se basaba en un cierto control financiero. Pero fijemos el presente 2009. El gran reto repito una vez más pasa por controlar lo descontrolado; es decir; tratar de hacer que el sistema finaciero sea nítido controlable y visible. Pero esto con las competencias y medios actuales del FMI y BM es simple y llanamente IMPOSIBLE. El fenómeno de la globalización no es un fenómeno reciente, pero si presenta en la actualidad algunas peculiaridades que lo disciernen del pasado. Hasta aquí es presumible comprender que la internacionalización de es un fenómeno controvertible en el momento que lo midamos en el comercio internacional de mercancias y bienes. Pero en el momentos que añadimos la globalización financiera esto es y será imposible controlar con los medios actuales. La desrelugación no ha hecho más que introducir invitados con opción a banquete en muchos activos financieros que son causa de la mayor crisis financiera nunca vivida. Me refiero a la entrada en escena de los países emergentes. ¿en manos de quién está la deuda pública americana? Los chinos reclaman sus intereses de la deuda confiados de que el mítico dolar es inexpugnable y no es susceptible de merma. El mito de tirar de la máquina y jugar con la fortaleza puede acabar. Si se plantea un escenario de deflación el encarecimiento de la deuda será insoportable. De ahí la necesidad de que los bancos centrales busquen a toda costa el temido impuesto inflacionario para todos los inversores que intentan rentabilizar sus activos. Asumo que me he desviado del asunto pero la concepción de mercados abiertos, y las operaciones financieras que se pueden realizar sin conocmiento alguno por autoridades supranacionales es un desfase que cimenta el edificio del pánico y la inestabiliad. ¿Cómo es posible que un señor desde su sillón de Singapur compre un activo en Amsterdam, y este a su vez lo revende en Tokio, sin conocimiento alguno de control y supervisión? Esto no hace más que agrandar la bola de nieve en los mercados financieros. Todo esto viene a colación por la reciente cumbre del G8 celebrada en Italia donde los mandatarios del mundo tienen la oportunidad de acometer las necesarias reformas de los organismos internacinales que velen por control y segurdad en los mercados financieros. ¿lo harán?.....
Un saludo.
Considero más valiente al que conquista sus deseos que al que conquista a sus enemigos, ya que la victoria más dura es la victoria sobre uno mismo. Aristóteles (384 AC-322 AC) Filósofo griego.
